domingo, 22 de marzo de 2015

Raso de Portillo: los toros castellanos

Los toros de la ganadería de Raso de Portillo, son un reflejo de la tradición castellana del ganado bravo.  Ubicada en los Rasos de la que toman nombre, durante siglos este paraje, ha visto como entre sus zonas pantanosas, han ido creciendo diferentes razas del toro bravo. 

La ganadería de la actualidad , amalgama de sangres, tiene su origen en la casta castellana que siempre creció en estos parajes. Con la evolución de los tiempos, otras incorporaciones fueron sumando a esta ganadería, a través de diversas ramas de Parlade. Las últimas incorporaciones fueron de sangre Santa Coloma, a través de Dionisio Rodriguez, y un semental de Benito Mora de la línea Coquilla.  Nunca se predominó una sangre sobre otra, haciendo una selección  por comportamiento.
La ganadería de hoy es el fruto de la incorporación de diferentes sangres, que da unas hechuras dispares. 
En cuanto al comportamiento, al igual que los castellanos, son duros, necesitan varios puyazos para amoldarlos, y eso sin moverlos en el campo.  Sin embargo cuando se le hacen las cosas bien, se entregan con nobleza y permiten grandes faenas.

Agradecer a la familia Gamazo y al mayoral su amabilidad al realizar este reportaje. 


Estos son algunos de los novillos de este año



























Los reproductores
















En manos de la familia Gamazo, los toros del Raso del Portillo, continuan su camino hacia el futuro, dando una imagen difícil de encontrar en otra finca, al encontrarse rodeada la finca de pinares.